PROVOLONE

El provolone es un queso italiano de pasta hilada, conocido por su sabor pronunciado y su versatilidad en la cocina. Originario del sur de Italia, el provolone se elabora principalmente en las regiones de Lombardía, Veneto, y Campania, aunque su popularidad se extiende por todo el país y más allá de sus fronteras.

Este queso se produce a partir de leche de vaca, aunque en algunas variedades también se puede utilizar leche de búfala. El proceso de elaboración del provolone comienza con la cuajada de la leche, que luego se moldea y se sumerge en agua caliente para que se funda y se estire. Después de darle forma, se sumerge en salmuera para desarrollar su sabor característico y se deja madurar durante un período de tiempo que puede variar desde unas pocas semanas hasta varios meses, dependiendo de la variedad.

El provolone se presenta en diferentes formas y tamaños, desde pequeñas bolas hasta grandes cilindros. Se clasifica en dos categorías principales: provolone dolce (dulce) y provolone piccante (picante). El provolone dolce es joven y suave, con un sabor suave y cremoso, mientras que el provolone piccante es más maduro y tiene un sabor más intenso y picante.

El sabor del provolone es robusto y distintivo, con notas acentuadas y a veces picantes que se intensifican con la maduración. Su textura puede variar desde firme y elástica hasta suave y cremosa, dependiendo de su edad y grado de maduración. Es un queso muy versátil en la cocina y se puede disfrutar de muchas maneras diferentes.

El provolone es perfecto para comer solo, en rodajas o rallado sobre platos calientes, como las pizzas o las pastas. También se puede derretir sobre sándwiches, hamburguesas o platos de verduras asadas para añadir un toque de cremosidad y sabor. Además, es un ingrediente popular en antipastos y tablas de quesos, donde su sabor pronunciado complementa una variedad de otros sabores.

En resumen, el provolone es un queso italiano versátil y delicioso que ofrece una combinación única de sabor y textura. Con su robusto sabor y su capacidad para fundirse, es un elemento imprescindible en la cocina italiana y una delicia para los amantes del queso de todo el mundo.